Cirugía de Cataratas
Todos tenemos un lente natural dentro del ojo que se llama cristalino, su nombre es debido a su trasparencia, gracias a él logramos enfocar al mirar a diferentes distancias con nitidez.
Con la edad este lente se va opacando por causas naturales generando disminución de la calidad y cantidad de la visión. Otras causas de que se opaque son traumas, alteraciones congénitas, enfermedades metabólicas como la diabetes o por consumo de medicamentos de forma crónica como los corticoides.
Cualquier opacidad en el cristalino se conoce como catarata y su único tratamiento es la cirugía, en esta se retira el cristalino opaco y se cambia por un lente de acrílico que se va a alojar en el sitio donde se encontraba la catarata y va a estar allí (dentro del ojo) para toda la vida.
Actualmente la cirugía de catarata se realiza usualmente por microinsición (es decir incisiones de manos de 2,5 mm que no requieren suturas) y empleando un equipo conocido como facoemulsificador que vibra a velocidad ultrasónica para pulverizar y aspirar la catarata.
Luego de extraer la catarata se introduce dentro del ojo el lente intraocular, que siempre es necesario.
Hay muchos tipos de lentes intraoculares, los lentes esféricos con los cuales los pacientes con una alta posibilidad pueden quedar con buena visión lejana, pero requiere usar gafas después de la cirugía para leer. Cuando existe una condición llamada astigmatismo en la córnea, se necesita un lente tórico para corregirlo.
Ahora también están disponibles los lentes intraoculares multifocales permiten una visión adecuada tanto para lejos como para cerca, y por ello le ofrecen al paciente la independencia de gafas para ambas distancias (lo cual se logra con este tipo de lentes en más del 90% de los casos). Ahora, no todos los pacientes son buenos candidatos para este tipo de lente, y por ello se requiere una cuidadosa valoración antes de cirugía.
Por otra parte, dada la eficacia y seguridad de la cirugía moderna de catarata, no necesariamente hay que tener catarata significativa para poder ser candidato a uno de estos lentes. En mayores de 50 o 55 años y que tengan miopía o hipermetropía significativa, aun cuando la opacidad del cristalino sea incipiente podrían ser buenos candidatos a un procedimiento denominado cirugía facorefractiva en donde se busca retirar el cristalino para colocar un lente intraocular multifocal (con la misma técnica de la cirugía de catarata) pero hecha para lograr independencia de gafas, en los casos en donde el tratamiento de cirugía refractiva con Excimer láser no sea la mejor opción.
La catarata más frecuente en nuestro medio es la catarata senil originada por el envejecimiento y deterioro de las proteínas del cristalino por la edad, pero existen también otras causas para esta enfermedad: metabólicas, traumáticas, inflamatorias, congénitas, entre otras.
Algunas enfermedades relacionadas son:
- Cataratas asociadas a la edad
- Catarata por traumatismo
- Cataratas congénitas
El único tratamiento definitivo que existe, a día de hoy, para tratar las cataratas es la cirugía.
Las revisiones periódicas de la vista permiten una detección precoz de las cataratas, lo que evita la evolución del problema facilitando su tratamiento.
Para poder evaluar de manera precisa cada caso y tomar decisiones en cuanto a los procedimientos mencionados, es importante realizar una historia clínica completa, exámenes diagnósticos de última tecnología y un abordaje integral del paciente por parte del oftalmólogo. Recordemos que cada cirugía tiene indicaciones precisas y debes tener una buena asesoría en el momento de implantar un lente intraocular.